jueves, 17 de febrero de 2022

VIRTUDES Y VICIOS

 VIRTUDES Y VICIOS

Extracto de una tesis guiada por la profesora Lilian Arellano 

Clases de virtudes:         

1.- Teologales: de procedencia divina; su objetivo es el mismo Dios, por tanto, no dependen del hombre; solo las descubre en sí y puede cultivarlas. Son la Fe, Esperanza, Caridad.  

2.- Naturales o Cardinales: son virtudes adquiridas, el hombre puede realizarlas y convertirse en virtuoso; son el contenido de la educación. 

Las virtudes Cardinales son: Prudencia, Fortaleza, Templanza y Justicia. 

 

PRUDENCIA:.

La virtud de la Prudencia: es saber existir, saber elegir el real bien; saber discernir lo que es bien de lo que es mal. Ser prudente significa:

1.- Saber pedir y dar consejo: saber a quién, sobre qué; requiere a una autoridad en el tema y considerar las circunstancias, esto es, cómo, dónde y cuándo pedirlo o darlo.  

2.- Saber juzgar: saber reflexionar.  Lo más elevado del alma es la inteligencia y lo ínfimo es la operación ejercida por medio del cuerpo. Entre ambos tenemos los siguientes grados: la memoria del pasado, la inteligencia de lo presente, la sagacidad, la consideración del futuro, la hábil comparación de las alternativas, la docilidad en asentir en los avisos de los más ancianos. 

3.- Ser considerado. La Consideración es indagar y valorar las circunstancias que influyen en una situación.

 

VICIOS:

1.- Carecer de docilidad, memoria y atención, implica el vicio de la precipitación. Ej.: El alumno comete una falta, el profesor le llama la atención y el alumno responde con un insulto.

2.- Carecer de cautela y circunspección, implica el vicio de la inconsideración, ej. Actuar descuidadamente 

3.- Carecer de inteligencia y de seguridad, implica el vicio de la inconstancia. Ej. Proponerse algo y no cumplirlo sin razones  

4.- La astucia: es el uso de vías fingidas y aparentes para conseguir un fin bueno o malo. El uso ya sea del engaño o fraude. 

5.- La solicitud ilícita de las cosas temporales. Ej. Soplar en una prueba, pedir a los padres lo que no pueden dar. 

 

FORTALEZA:

La virtud de la Fortaleza: es disposición y fuerza para abrazar los sufrimientos y aun la muerte, cuando así lo exige una causa justa.  En otras palabras, consiste en soportar firmemente algo difícil. Sus actos propios son el acometer (consiste en erradicar los obstáculos, crear nuevos caminos) y el resistir (es vencer la tentación, aunque signifique un esfuerzo muy importante, dominar el impulso o dolor, sabiendo que el resultado le va a perfeccionar). 

Las virtudes anexas a la Fortaleza son:

1.- La magnanimidad es quien tiende a cosas dignas define como grandeza del alma;

2.- La magnificencia tender a la realización de una obra grande, lo que requiere gastos proporcionados;

3.- La paciencia: es la tolerancia voluntaria y continua de cosas arduas y difíciles por un bien honesto y útil; la paciencia como virtud soporta con calma la angustia mental o física, no por orgullo o ambición mundana, sino por Amor;

4.- La Perseverancia: es soportar la dificultad que implica la duración de la obra virtuosa.

 

VICIOS:

1.- La timidez: es un temor exagerado, que por lo mismo se convierte en vicio. Es justo temer al peligro y es deber arriesgarse cuando un bien superior lo requiere, esto no será sino valentía; pero el tímido es aquel que huye o no enfrenta una situación, dejando de lado un bien superior por uno menor, e incluso actuando mal, por un temor sin sentido. Quien refleja timidez, presenta, además:

2.- Desesperación: es pérdida total de la esperanza, al no ver solución a los problemas que enfrenta y

3.-  Debilidad: el hombre que es débil se deja llevar en primer lugar por las pasiones, dejando de lado lo que la razón ordena, perdiendo la capacidad de inteligir por su falta de vigor, muchas veces huyendo de las dificultades que se presentan; huye de todo aquello que le provoca sufrimiento;

4.- Audacia: es una pasión, la cual es a veces moderada por la razón, otras veces no se somete a ella, por defecto de temor, así se convierte en un vicio.

6.- Presunción: es presuntuoso el que intenta lo que va más allá de sus facultades. ej., quien viste en forma lujosa, sin contar con el dinero suficiente.

5.- Ambición: es apetito desordenado y exagerado de las cosas, deseando más de lo que obtiene y jamás estando conforme con lo recibido.

6.-Flojedad: es la persona que cede ante la más pequeña presión, no terminando lo que se había propuesto.

 

TEMPLANZA: La virtud de la Templanza: regula y modera los apetitos posibilitando la existencia armónica, la paz o equilibro espiritual necesarios para existir. Su objeto propio son las pasiones del apetito concupiscible, es decir, aquellas que se padecen por el deseo de lo ausente o el placer de lo poseído.

 

JUSTICIA: La virtud de la Justicia: es dar a cada uno lo que merece o corresponde. Es la virtud de la convivencia. Se origina en el haber interno de la persona expresándola luego en sus acciones. Ordena al hombre al Bien Común: bien de todo prójimo, por tanto, propio, porque todos somos personas. El Bien Común asume el bien singular de una persona, por tanto, es superior, no se oponen.

VICIOS:

1.- La ignorancia. Es privación de la verdad, la cual es nuestro deber poseer, pues es la verdad la que impide el acto malo al ser directriz de los actos humanos. Quién descuida el poseer o hacer algo, que tiene obligación de poseer o hacer, peca por ignorancia responsable, esto es, por negligencia. Distinta es la ignorancia irresponsable que consiste en desconocer cosas que no están a nuestro alcance. Por ser ésta involuntaria, por no estar en nuestro poder superarla, o por no ser nuestro deber el hacerlo.

2.- La pasión o flaqueza: las pasiones son enfermedades. Las enfermedades son flaquezas. En consecuencia, la pasión enferma a la persona cuando sus partes están en desorden, impidiéndole la práctica armoniosa de sus operaciones, es decir, cuando no se someten al orden real que la inteligencia y la voluntad –virtudes rectoras de la fuerza del alma- deberían descubrir y anhelar. Ej. el hombre que, por ir tras los deseos libidinosos, se olvida de amar.

3.- La malicia: consiste en la consciente preferencia por el mal, guiado únicamente por el goce temporal que este mal provocará. Así, la malicia es tal cuando deliberadamente el hombre se propone el mal; es el mal elegido por ser tal, por intención deliberada. Tenemos así el de soberbia y avaricia.

 

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario